Cuando arranqué no tenía idea que es lo que iba a salir. Empecé a volcar los retazos de telas que tenía sobre las tapas y apareció una gran cantidad de colores con una sola imágen (para mi un jarrón).
Como me gustó decidí pegarlo, pero para eso se deben quitar todas las telas y empezar a aderir de a una. Por lo tanto no quedó como lo pensé o como lo ví la primera vez pero igual me gustó. Tenemos vatias texturas diferentes. La tela naranja es más sintética y porosa (fue usada en el mini anotador), las telas azules y verde clarito son de paraguas (se usaron en agendas anteriores como la del medio corazón o la del pitucón) y por último la verde oscura es más suave y uniforme (tela de ambo) y la roja es un aguayo con dibujo.
También se puede observar relieve ya que tenemos tela sobre tela, un bolado utilizando el sector de la costura que tubo una de las participantes y algunas "imperfecciones" en el pegado que surgen por utilizar materiales que no fueron diseñados para este fin. Por último un elástico violeta para añadir un color más.
Este taller comenzó con la idea de aprender a reencuadernar libros y realizar algunos trabajos manuales… con el transcurso del tiempo se fue convirtiendo en confección de algunos cuadernos y agendas. Ahora me surgió la idea de hacer cosas personalizadas; si bien continúo aprendiendo y realizo cuadernos y encuadernaciones de mi propio gusto, la idea es generar que quien vaya a utilizar el producto (o lo vaya a regalar) ponga algo propio y así lograr algo que es irrepetible.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario